La alfa sinucleína es una proteína que ha cobrado protagonismo en la investigación sobre el Parkinson. Se encuentra de forma natural en el cerebro, pero su acumulación anormal está relacionada con el daño neuronal característico de esta enfermedad neurodegenerativa.
Desde el Centro de Medicina Neuro-Regenerativa, le explicamos qué es la alfa sinucleína, cómo interviene en el Parkinson y en qué consiste la neurodegeneración por alfa sinucleína.
¿Qué es la alfa sinucleína?
La alfa sinucleína es una proteína neuronal presente en las células nerviosas del cerebro. Esta proteína se localiza principalmente en las terminaciones nerviosas y participa en la liberación de neurotransmisores, como la dopamina, un componente esencial para el control de los movimientos del cuerpo.
De forma natural, la alfa sinucleína adopta una estructura soluble que le permite participar de forma activa en la comunicación entre neuronas. Sin embargo, cuando se producen alteraciones en esta proteína, puede adoptar una forma insoluble y agregada, formando estructuras llamadas cuerpos de Lewy, que son una de las señales de la enfermedad de Parkinson.
Funciones principales de la alfa sinucleína:
- Regulación de la liberación de neurotransmisores: Interviene en el proceso de liberación de dopamina, un neurotransmisor esencial para la función motora.
- Control de la función sináptica: Participa en la comunicación entre neuronas para asegurar una correcta transmisión de señales.
- Equilibrio de las vesículas sinápticas: Se encarga de estabilizar las vesículas sinápticas, pequeños compartimentos que almacenan los neurotransmisores antes de su liberación.
En personas sanas, esta proteína se encuentra en equilibrio. No obstante, en las personas con Parkinson, este equilibrio se rompe, y la alfa sinucleína se acumula de forma anómala en las células nerviosas.
¿Cómo interviene la alfa sinucleína en el Parkinson?
La relación entre la alfa sinucleína y el Parkinson es uno de los temas más estudiados en la investigación neurodegenerativa. La acumulación anormal de esta proteína en forma de cuerpos de Lewy es una de las características que se observa en los cerebros de personas con Parkinson.
A continuación, explicamos los principales mecanismos por los cuales la alfa sinucleína interviene en el desarrollo del Parkinson:
- Formación de cuerpos de Lewy
Los cuerpos de Lewy son depósitos de alfa sinucleína que se forman dentro de las neuronas. Estas acumulaciones se producen porque la proteína pierde su forma natural, se pliega de forma incorrecta y se vuelve insoluble. Los cuerpos de Lewy interrumpen la función normal de las neuronas, afectando principalmente las células encargadas de producir dopamina, que es la sustancia que permite realizar movimientos precisos y coordinados. - Muerte de neuronas dopaminérgicas
La acumulación de alfa sinucleína provoca la degeneración neuronal, especialmente en la sustancia negra del cerebro, que es la zona encargada de la producción de dopamina. La reducción de los niveles de dopamina en el cerebro es una de las causas directas de los principales síntomas motores del Parkinson, como los temblores, la rigidez y la lentitud de los movimientos (bradicinesia). - Daño celular por estrés oxidativo
La acumulación de cuerpos de Lewy provoca estrés oxidativo, un proceso en el que se producen radicales libres que dañan las estructuras celulares. El daño oxidativo afecta la membrana celular, el ADN y las proteínas de las neuronas, lo que termina acelerando su degeneración. - Propagación de la alfa sinucleína
Otro fenómeno que se ha observado es la propagación de la alfa sinucleína de una célula a otra. Se ha propuesto que esta proteína anómala se transfiere entre neuronas de forma similar a cómo actúan los priones, proteínas infecciosas relacionadas con enfermedades neurodegenerativas. Este proceso podría explicar por qué los síntomas del Parkinson no solo afectan la motricidad, sino también el sistema digestivo y el olfato, donde también se ha detectado la presencia de cuerpos de Lewy. - Alteración de la función mitocondrial
Las mitocondrias son los «motores de energía» de las células, y su correcto funcionamiento es esencial para la salud neuronal. La acumulación de alfa sinucleína en las neuronas interfiere en la función mitocondrial, provocando una menor producción de energía celular y facilitando la muerte neuronal.
¿Qué es la neurodegeneración por alfa sinucleína en la EP?
La neurodegeneración por alfa sinucleína es el proceso de daño y muerte neuronal causado por la acumulación de esta proteína en el cerebro. Este fenómeno es característico no solo del Parkinson, sino también de otras enfermedades neurodegenerativas, como la demencia con cuerpos de Lewy y algunas formas de atrofia multisistémica (AMS).
El proceso de neurodegeneración ocurre de forma progresiva y afecta de forma gradual el funcionamiento de distintas partes del cerebro:
- Daño en la sustancia negra
La sustancia negra es una de las áreas más afectadas por la acumulación de alfa sinucleína. Aquí se encuentran las neuronas dopaminérgicas, responsables de controlar el movimiento. La neurodegeneración en esta región provoca la pérdida de dopamina, que es la responsable de la aparición de los principales síntomas motores del Parkinson. - Afección del sistema nervioso autónomo
La alfa sinucleína no solo se acumula en la sustancia negra, sino también en otras partes del sistema nervioso central y periférico. De este modo, afecta funciones como la digestión, el control de la vejiga y la presión arterial, lo que explica síntomas como la vejiga hiperactiva, el estreñimiento o la hipotensión ortostática en personas con Parkinson. - Impacto en el sistema nervioso entérico
Se ha descubierto que la acumulación de alfa sinucleína también se da en el sistema nervioso entérico, que controla las funciones digestivas. Esta afectación explica por qué algunas personas con Parkinson experimentan síntomas gastrointestinales, como el estreñimiento crónico. Esta relación ha llevado a la hipótesis de que la enfermedad de Parkinson podría comenzar en el intestino antes de afectar al cerebro. - Pérdida de funciones cognitivas
En etapas avanzadas de la neurodegeneración por alfa sinucleína, las acumulaciones también se observan en áreas cerebrales relacionadas con la memoria, la atención y la cognición. De este modo, algunas personas con Parkinson pueden desarrollar deterioro cognitivo o demencia con cuerpos de Lewy, especialmente en las fases finales de la enfermedad.
La alfa sinucleína juega un papel crucial en la neurodegeneración por Parkinson. Cuando esta proteína se pliega de forma incorrecta y se acumula en forma de cuerpos de Lewy, se desencadenan una serie de daños neuronales que afectan la producción de dopamina y la salud general del cerebro. Este proceso explica la aparición de los síntomas motores y no motores del Parkinson.
Desde el Centro de Medicina Neuro-Regenerativa, destacamos la importancia de estudiar a fondo la alfa sinucleína para encontrar nuevas soluciones terapéuticas que permitan mejorar la calidad de vida de las personas con Parkinson. Nuestra terapia de implantología auricular permanente es una opción que puede ayudar a mejorar los síntomas de la enfermedad, al reducir la dependencia de los medicamentos y fomentar la estimulación de las neuronas de forma natural.
Si te ha gustado este artículo, quizás quieras leer: